diccionario Things To Know Before You Buy

El objetivo de este artículo es ofrecer un análisis de algunas de las particularidades del nuevo discurso lexicográfico de la RAE a través del estudio contrastivo de cien artworkículos lexicográficos presentes en la edición impresa de 2001, sus enmiendas en línea para la edición de 2014 (en caso de artworkículos para los que se propusieran enmiendas como paso previo a la nueva redacción) y las definiciones definitivas recogidas en la vigesimotercera edición impresa. La novedad de la propuesta reside en el hecho de llevar a cabo un análisis discursivo conjunto del diccionario en cuanto a la identificación de líneas generales de adaptación de las definiciones a algunos de los nuevos requerimientos de la sociedad. Asimismo, el análisis permite completar la historia de la evolución ideológica de los diccionarios usuales de la RAE.

No insistiremos en las novedades relativas a ciertas cuestiones formales que se pueden consultar en las páginas iniciales del DRAE (2014), y que también tienen que ver con el didacticismo de la obra, sino que abordaremos tendencias generales y estrategias discursivas no referidas explícitamente en esas páginas.

La modalidad apreciativa o valorativa es una de las que de forma más evidente hacen visibles los posicionamientos de los redactores y redactoras del texto lexicográfico.

A modo de conclusión, conviene recordar que lo que aquí hemos recogido acerca de los criterios de organización y tipos de diccionarios es tan solo una selección basada en la que ya han realizado otros autores, razón por la cual puede haber otros criterios que no se hayan mencionado o tipos de diccionarios que se hayan omitido o incluido en otra categoría.

Algunas de las novedades han afectado a la macroestructura, como la eliminación de entradas independientes para variantes de género de algunas voces, la eliminación de entradas y acepciones anticuadas o la incorporación de lemas y acepciones que codifican nuevas realidades o que no se habían introducido anteriormente; y otras, las más, a la microestructura.

La revisión de la totalidad de enmiendas que presenta la vigesimotercera edición del DRAE y el cotejo de la edición de 2001, las enmiendas y la versión definitiva de 2014 de los artworkículos seleccionados han revelado, además de la tendencia common a la adaptación de la técnica lexicográfica, una serie de estrategias conducentes a modernizar el diccionario y a paliar parcialmente el problema de la presencia de la perspectiva privativa de los redactores y redactoras en el discurso lexicográfico.

Ella buscó la palabra en la edición nueva del diccionario.She searched for the word while in the new edition of the dictionary.

Este hecho lleva a pensar en las diferentes plumas que intervienen en la redacción del diccionario oficial, y en la complejidad de la armonización.

Por otra parte, y también en cuanto a los comentarios recogidos en el preámbulo del diccionario de 2014, la "descalificación del prójimo", las definiciones sesgadas, ofensivas o hirientes, no son los únicos puntos que deben ser sometidos a actualización en el diccionario académico. Uno de los aspectos más relevantes es la proyección de un ethos privativo de las personas responsables de la redacción de los diferentes artworkículos. El ethos es un concepto clásico que surge en el marco de la retórica aristotélica. Además de su consideración como construcción discursiva de la imagen del sujeto enunciador este concepto remite al conjunto de rasgos y modos de comportamiento que conforman la identidad de una persona o una comunidad y orientan su forma de ver el mundo y sus hábitos de vida.

Sin embargo, estos no son solo los únicos diccionarios que podemos consultar; como trataremos de explicar a lo largo de estas líneas, existen muchos tipos distintos cuya clasificación puede depender Get More Information de diferentes criterios.

Se resumen a continuación las directrices generales que, tras el análisis de nuestro corpus, hemos podido determinar en cuanto al proceder de la RAE en su discurso lexicográfico, relativas fundamentalmente al segundo enunciado de la definición:

El problema es que la falta de rigor y sistematicidad en la aplicación de estas directrices se revela en el hecho de que los cambios se producen en algunos artículos concretos, clave, y en el hiperónimo con el que se encabezan algunas definiciones y no en el cuerpo standard de estas, incluidos los ejemplos, lo cual implica cierta incoherencia si valoramos en conjunto esta medida de escritura no sexista (en ‘alumno’, na se mantiene, por ejemplo, profesor; en ‘corazón’ se mantiene la referencia a hombre; por citar algunos).

Además, fue usado por Microsoft Business por muchos años y su contenido fue posteriormente licenciado a Microsoft a perpetuidad para que lo usen como propio.

Entre las directrices del nuevo discurso lexicográfico de la RAE relativas a aspectos del sexismo lingüístico destaca la de no presentar un trato inicuo para mujeres y hombres en el diccionario, por lo que han empleado distintos recursos para paliar los problemas que el DRAE arrastra desde el siglo XVIII. Entre estos recursos se encuentra la unificación bajo entrada única (lema con moción), la correcta marcación (como en ‘zorra’, que en 2014 se define bajo el artworkículo ‘zorro, rra’ y se matiza con marcas pragmáticas que indican que equivale a "prostituta" cuando es usado de forma despectiva y malsonante) y la sustitución de sustantivos que remiten a un solo sexo por otros epicenos como persona con el fin de evitar prejuicios y presuposiciones que cargasen las definiciones visiones particulares y tendenciosas.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *